by David Pereda | Nov 1, 2006 | Español, Food and Beverage
Mi pequeña hija, quien tiene apenas tres años, ama el vino; pero me adelanto. Como diría Aristóteles, empecemos por el principio: ¡Bienvenidos a mi columna! Si usted lee estas líneas es porque le interesan los vinos tanto o más que a mi Sophia, a mi amigo Carlos...